sábado, 2 de junio de 2012

parcial presencial

estoy al fondo del aula a punto de hacer un parcial. me entregan el pedazo de hoja con dos consignas y una cita que sé de memoria en el medio.
tengo que responder, pero no, no sé responder esto. son ocho temas y me toca el primero.
lo primero que pienso es por qué tuve que sentarme justo en esta silla, si me hubiera tocado el tema 8, el tema 6, o cualquier otro tema.
estuve leyendo hasta recién en casa, de la bibliografía que tenía para leer llegué a leer la mitad. de 9 unidades leí 4 y media.
dije: mientras no me tomen fuga sin fin y may day, la piloteo.
leo el parcial que tengo que responder. consigna uno: fuga sin fin, y es más: el relato alegórico de kafka que nunca leí, solamente escuché en la primera clase y no me acuedo si el mensajero tenía que salir o entrar al imperio-palacio?. no tengo el texto impreso.
consigna dos: may day
hay que limpiarse de la vida primero para responder un parcial. digo: -bien, en voz alta. miro alrededor, todos escriben, sacan de las mochilas hojas pasadas a pc que ellos mismos armaron. cómo hacen, cómo viven, cómo son por dentro sus cabezas? en qué parte ponen la literatura? en qué parte lo otro? qué es lo otro? cómo distancian al amor de esto? dónde están sus instintos vitales, cómo alejan la vida de las palabras? quisiera ser cualquiera de ellos durante estas dos horas.
yo tengo las fichas de las 5 unidades incompletas que estudié escritas a mano y textos que leí y que no leí.
dejo que me descanse la cabeza, me dormiría una siesta, me tomaría una cerveza. pienso en irme, pero nunca voy a irme. si hubiera inventado una enfermedad para presentarme al recuperatorio. ya es tarde, aunque podría desmayarme y cuando alguien se diera cuenta me sacaría del aula y tendría que volver a dar el recuperatorio.
no llego al estudiante medio, no sirvo para ser un estudiante medio, detesto las estructuras mentales y la organización que requiere la cabeza para responder un examen. pienso en poner una verdulería, me encantan las verdulerías, podría relacionar cada verdura con un poema o con un autor, o con una frase. fuga sin fin sería una papa llena de brotes que visiblemente se alargan. may day una lechuga morada pudriéndose sin que se note, rilke sería la brillante berenjena, kafka un rabanito.
miro las palabras. la primera de la hoja: FUGA, me encanta.
sé que donde agarre la birome las palabras se van a suceder unas a otras aunque no haya nada de contenido en ellas. van a nombrar la nada, de distintas maneras, repetidas veces.
prefiero dar un oral, prefiero levantarme y chamuyar en voz alta. estoy en un umbral, soy presa de una indiferencia intensa, ¿cuál es la diferencia entre vida y literatura?
soy presa de una indiferencia intensa, pienso en escribir esto ahora, pero no puedo dejarme llevar por semejante idea infantil y estúpida, tengo que poner la energía en inventar una salida inteligente.
después de media hora, agarro la birome: "A diferencia de.....la fuga...." leo la primera y la última hoja de la novela. escribo con pasión, con seguridad, con efecto. ya sé que todo eso no sirve, pero es la única manera que tengo para escribir, de los textos que leí, uso los q vienen solos a la cabeza, los relaciono, los cito, pongo comillas, notas al pie, palabras pomposas. sé que es lo peor que puedo hacer y lo único.
la palabra fuga se repite 23 veces en las tres carillas que escribo. el mensajero de kafka, ¿tiene que entrar o salir? intento recordar, ninguno de los chicos que están al lado trajeron el texto que me falta. pienso: seguramente tiene que salir, es obvio que tiene que salir, y escribo con insistencia la palabra salir.
del resto se encarga la misma fuerza que hizo que me tocaran justamente los textos que no leí. una de cal y otra de arena, soy agnóstica pero creo demasiado.
recorro las hojas con una mirada indiferentemente intensa, entrego 3 hojas que sólo dicen que dicen. me voy
al tiempo me devuelven el parcial: la nota más alta de mi estadía académica.