sábado, 10 de agosto de 2013

la escuela rural


Ahora soy profesora rural. Tengo que abrir la tranquera y la puerta de la escuela con la llave que me dan en la sociedad de fomento. Bajar los bancos de arriba de las mesas y subir la estufa. calentar el agua para el mate en la pava eléctrica que dejan en el aula y que una de mis alumnas no podía hacer andar. así que las dejé ahí un rato frente al pizarrón y fui a poner el agua yo. resulta que el botón no se había encendido cuando lo intentó mi alumna. y después sí, pudimos seguir la clase con el mate.
la gente de campo tiene otra energía, nada que ver. mis alumnos son 7, pero en la primera clase fueron dos, una de 45 años y la otra de 30. con la de 45 estuve charlando más de una hora hasta que convenció por mensaje a su compañera para que venga a clase. toda esa hora en la que estuve sola con ella pensaba en si tenía que empezar a dar la primera clase para una alumna sola, o si le tenía que decir que anulábamos esa clase y yo me quedaba girando por las calles de tierra hasta que se hicieran las 20, y ella se volvía a su casa, a dos cuadras de la escuela.
pensé también que por suerte esa no fue mi primera experiencia como profesora, porque si no no sé qué hacía. capaz me hubiese quedado en la sociedad de fomento, con Silvia, que fue la que me dio la llave después de que caminé varias veces por la cuadra, intenté abrir la puerta de la biblioteca, hasta entrar ahí, correr las cortinas naranjas a rayas y pasar por atrás de los pibitos que miraban una película que se escuchaba en todo el pueblo. Silvia se me cagó un poco de risa, lo que me hizo sentir bastante urbana y bastante pelotuda, porque yo le aclaré varias veces que después de terminar la clase le devolvía la llave o en caso de que los alumnos tengan otra clase se la dejaba a ellos, "total, siempre se manejan así, no?". ella me dejó el manojo y me dijo que cualquier cosa estábamos al lado, que no me preocupe, que me fijara las luces, y qué aula era la que me tocaba.

4 comentarios:

viole dijo...

que lindo ser maestra rural, es casi un sueño, ser directora de la una escuela rural
te llenás de guita

Arce dijo...

si, soñado. pero todavía no entendí bien la onda, ya vamos a construir una escuela rural en alguna provincia así vas de directora y te llenás de guita

Anónimo dijo...

ja venia a comentar algo sobre el el texto y me encuentro con estos dos comentarios increibles
soy mer poniendome al dia con los blogs

Arce dijo...

espero tenerte cotidianamente por acá merch, y que abras uno para poder leerte seguido también.
me encantaría que seamos "personas al día con los blogs" a esta altura del partido